
La olivina proporciona confianza en las propias capacidades, el amor propio, conexión con tu sabiduría interior y claridad mental. Favorece la purificación emocional, la comprensión sobre los propios sentimientos ( como la ira, la rabia y sobretodo los celos). Es de gran ayuda para que te liberes de aquello que ya no te sirve. La rodocrosita es la maestra del corazón para asimilar sentimientos dolorosos. Eleva la vibración dotándote de una actitud positiva, alegre y dinámica. El cuarzo es un gran protector, el blanco es el más poderoso de los cuarzos y unos de los cristales de mayor valor espiritual. Proporciona valor para superar las adversidades. La howlita calma la mente y es una gran aliada para la meditación y la práctica de yoga, además de muy relajante.